No es sólo un trámite burocrático, registrar tu marca es bautizarla ante el mundo de los negocios con el fin de protegerla y disponer libremente de ella de acuerdo a tus necesidades y objetivos comerciales. Nos encontramos en un mercado sumamente competitivo donde debemos diferenciar a nuestra marca en todo momento, dicha diferenciación comienza desde el nombre y logotipo los cuáles deben ser registrados ante el IMPI.
Si has decidido no registrar tu marca o posponer el registro, te recomendamos pensarlo dos veces. A pesar de que no es un trámite obligatorio, el hecho de no registrarla puede traerle consecuencias a tu empresa a mediano o largo plazo.
Si no registras tu marca un tercero podría comenzar a usar tu marca y no podrás impedirlo. También existe la posibilidad de que alguien registre tu marca impidiendote así seguir usándola aprovechandose de la reputación que has construido para tu marca.
Te recomendamos realizar el registro de tu marca a través de un agente de patentes y marcas para recibir un asesoramiento personalizado evitando gastos innecesarios.
